Reseña: El tribunal revolucionario de Barcelona (1936-1937)


El tribunal revolucionario de Barcelona (1936-1937)
Eduardo Barriobero y Herrán
Ediciones Espuela de Plata, Valencina de la Concepción, 2007
14 euros

El segundo libro tiene en común con el primero que su autor sufrió las mismas acusaciones infundadas que Joaquín Ascaso. En efecto, Eduardo Barriobero y Herrán, que acabaría sus días fusilado por las tropas franquistas en Barcelona, fue acusado de mantener cuentas secretas en Francia. Esta injuria surgida de la contrainteligencia franquista y repetida a bombo y platillo por Queipo de Llano, al más puro estilo goebbeliano, sembró la duda en el campo antifascista, haciendo caer en desgracia a Barriobero. Así su papel como presidente del Tribunal Revolucionario de Barcelona, una entidad eminentemente revolucionaria, quedó en entredicho. Su figura fue ninguneada por los sectores antifascistas incluida la CNT-FAI, que atrapada en su política gubernamental no supo ayudar a quien fuera durante muchos años uno de sus abogados más prestigiosos.

En el libro, aparte de narrarse las miserias de los entresijos de la política gubernamental en la Cataluña antifascista, se relatan las grandezas del Tribunal Revolucionario de Barcelona. Este organismo intentó poner en marcha una justicia acorde a los nuevos tiempos que vivía Barcelona, una vez que el proletariado militante hubiera derrotado al fascismo golpista. Las actuaciones de este tribunal tuvieron siempre en su con la burguesía catalana que, pese a haber enarbolado la bandera del antifascismo, no tenía más interés que la defensa de su clase.

Interesante libro, por tanto, para descubrir las actuaciones positivas y creadoras del anarquismo, siempre acusado de destruir.